viernes, 30 de septiembre de 2011

EL HOMBRE Y LA SOCIEDAD ACTUAL

Todo hombre en su caminar diario, va dejando un rastro, unas huellas que lo identifican y que, al mismo tiempo, lo condicionan e imponen carácter de un ser autónomo y personal, enmarcándolo dentro de una sociedad que lo acepta, o, por el contrario, lo rechaza o lo margina.

Al mismo tiempo, se ve inmerso en un entramado social que, a veces, lo coacciona obligándolo a definirse y a mantenerse fiel a sus principios, o bien, lo esclaviza, convirtiéndolo en un ser anodino y aborregado, incapaz de ser libre y de actuar por sí mismo.Es entonces, cuando el hombre
necesita algo, o a alguien, que lo saque de su vida chata y sin sentido.

Lo malo es, que no solemos percatarnos del problema hasta que éste comienza a asfixiarnos. A partir de ahí, solemos dar palos de ciegos, sin saber contra que o contra quien luchamos, sin lograr solventar nuestra situación, sino agravarla, porque dirigimos nuestras iras contenidas contra quien menos culpa tiene, amargando nuestro ambiente familiar en lugar de convertirlo en lugar de remanso de paz y de armonía, que estabilice y dulcifique nuestro carácter, y sesiegue nuestras emociones.

Al menos, esto logramos entender durante un seminario iberoamericano sobre "Humanidades", por cierto de gran importancia y valía para aplicarlo en los actuales momentos de campaña electoral, cuando en nuestro territorio patrio, entre hombre y sociedad, se están dando otros aspectos, muy incidentes en la democracia.

Si bien, en el Departamento de Córdoba, cada quien "jala" para su lado convencional, podemos afirmar con franqueza que, a esta tierra de cosas reales e imaginarias, embrujada por los mitos, nada bueno le podrá sobrevenir en los próximos cuatro años. Ojalá no nos equivoquemos.

Autor:

HUGO BUELVAS POSADA

No hay comentarios:

Publicar un comentario